La democracia está secuestrada por una clase política infame que desprecia la auténtica voluntad popular. Tenemos que comenzar una rebelión (que no revolución) ciudadana para cambiar este estado de cosas
viernes, 15 de abril de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Gracias por extender esta idea. Estoy encantado de que haya llegado a tu blog. Paso a dar el enlace por si alguien tiene problemas con pillar la idea.
ResponderEliminarhttp://trapoblanco.blogspot.com/
Juntos vamos a lograr que se nos respete como lo que realmente somos: personas. Un abrazo.